No todos nos hacemos esa pregunta, pero cuando respondas mentalmente a estas veras que o eres un zombie o estás muy cerca de transformarte en uno.
¿Comes de manera compulsiva?
Seguro que cuando tienes un plato de papas bravas en la mesa no paras de comer hasta saciarte, sin importarte que te caiga salsa por la barbilla, y los dedos se te ponen pringosos, pues como puedes comprobar haces los mismo que un zombie con el cerebro.
¿Arrastras los pies al caminar?
Mírate los pies un lunes por la mañana temprano, fíjate en como andas camino del trabajo, universidad o colegio. Seguro que más de dos o tres arrastran literalmente los pies. Así que muy lejos de ser un zombie no estás, por que también te mueves como el.
Mírate las suelas de los zapatos, las tienes desgastadas con tanto roce.
Te encanta ir en grupo
Como buen ser social no puedes hacer nada solo, te encanta ir en grupo, acompañados de otros de tu misma especie para hacer cualquier cosa. Pues los zombies son iguales, casi siempre van en grupo, es raro ver a uno solo.
Mírate en un espejo a las 7 de la mañana
Un día que estés de marcha mírate en el espejo cuando sea el alba y no hayas ligado, fíjate que cara tienes, seguro que es muy parecida a la de un zombie, y si encima te has pasado con las copas, tendrás la misma la de la foto.
Cuando te quita esa plaza de parking en el centro
Los zombies parecen que siempre están cabreados y enfadados, pues espera a que alguien te quite una plaza de parking en el centro de la ciudad un sábado por la noche después de llevar más de media hora dando vueltas con el coche. Se te quedará la misma cara de cabreo que a este zombie.
El que no tiene coche no sabe como se te queda la cara, pero es la misma si estás mas de una hora en la cola y cuando llega tu turno se han agotado las entradas, o cuando estás esperando en internet a comprar una entrada y al finalizar el formulario y pinchar en el botón de comprar te da error y tienes que volver a empezar.
Despellejar al que no está en la reunión
Cuando estés en una reunión mira como todos despellejan a los que no están, les sacan las tripas y lo ponen verde, no dejan a nadie vivo.
Así que igual que los zombies, seguro que les sacas las tripas a todo bicho viviente.
Pues si, ¡eres un zombie y no lo sabes!
Ya te hemos dado unas pistas, pero hay muchos otros detalles que te confirman que eres un zombie. Como ya lo sabes, no te preocupes, puedes seguir viviendo como hasta ahora, pero solo que ya sabes que en verdad perteneces a este grupo de muertos vivientes y siéntete orgulloso de ello.